Peres puede diagnosticar en qué fase del proceso natural de descomposición se encuentran los productos a base de de cerdo, ternera, pollo y pescado. Esto es posible gracias a unos sensores que analizan el aire cercano a la carne.
Tomando como base los compuestos químicos en el ambiente que expelen, el sistema calculan su nivel de frescura y avisa a su usuario si el alimento es apto para ser consumido.
El gadget se vincula con una aplicación móvil, mandando al instante el diagnóstico de la calidad de la muestra de carne. Sus creadores buscaron financiamiento para su idea a través del crowdfunding en Indiegogo, y a menos de una semana de que se termine el periodo de recaudación en el portal ya superaron su meta.