DIRECTO

Escucha Happy FM Fuerteventura

El oportuno viaje al pasado de The Cardigans en el Dcode

‘Gran Turismo’ fue el momento en que el grupo giró desde la seguridad de las expectativas y se dirigió hacia los horizontes de lo desconocido

Como montados en un Delorean, más que en un Gran TurismoThe Cardigans nos condujo a todos a 1998, el año en el que sorprendieron al mundo con su cuarto álbum de estudio. Veinte años después de este punto clave en la carrera del grupo sueco, Nina Persson y los suyos subieron al escenario principal del madrileño festival DCODE para hacer las delicias de todos los que se habían acercado a despedir el verano.

Incluso con la pequeña discografía de The Cardigans, que cuenta con seis discos, Gran Turismo fue una auténtica revolución en su carrera. Vendió más de tres millones de copias y dio lugar a una gira que duraría tres años. Y todo ello, además, dejando de lado ese pop dulzón de antaño, optando por una estética mucho más sombría y un sonido más oscuro y melancólico. Muchos se sorprendieron por este viraje a la oscuridad de la banda, pero si algo dejó claro desde que se fundó, en 1992, es que no iba a ser fácil encasillarlos. Persson y los suyos se criaron con una disciplina musical muy próxima al black metal, antes de descubrir sonidos más animados propiciados por The Smiths o The Stone Roses.

Solo un año antes de publicar Gran Turismo, en 1997, The Cardigans ya se había convertido en la exportación sueca más importante desde ABBA, con aparición en la serie Beverly Hills incluida y con Lovefool elevando su popularidad hasta el infinito por formar parte de la Romeo + Julieta de Baz Luhrmann. En una entrevista en 2009, el productor e ingeniero de sonido Tore Johansson habló ya de ese sonido oscuro del disco, que lo distingue de la sensación cálida e improvisada de otras grabaciones previas: «Es una grabación muy fría y definida, sin reverberación natural ni cortinas de audio: no hay ni un elemento sonoro en ese disco que deliberadamente no hubiese sido puesto allí».

Gran Turismo fue, por tanto, una progresión natural, un deseo de evolucionar. Persson canalizó en el disco todos esos miedos y vacíos tan propios de los últimos noventas y conectó rápidamente con esa generación. Quizá por eso eran más los treintañeros que los de 20 los que disfrutaron de un concierto tan especial como este, en el que sonaron una a una todas las canciones de este disco clave en la historia de los suecos. Un show delante de casi 20.000 personas en la que se volvimos a recordar las ganas que tenía el grupo de escapar, de romper con todo lo que habían hecho hasta entonces. El deprimente ritmo de Explode, las guitarras gruesas y los ritmos fragmentados de Higher, los contundentes Junk of the Hearts y Marvel Hill… Y, por supuesto, los tres singles que en su día se extrajeron del disco: Erase/Rewind, Hanging Around y My favourite game, que hizo que el festival al completo viajara a otra época.

Gran Turismo demostró ser un éxito mundial, consolidando a The Cardigans como una banda a tener muy en cuenta en el panorama del rock. Sin embargo, una vez que la gira mundial finalmente llegó a su fin a principios de siglo, Persson quería poner fin al viaje. Finalmente se volvieron a reunir en 2003 para seguir y publicaron dos nuevos discos, el más cercano al country rock de Long Gone Before Daylight y el más estabilizado Super Extra Gravity de 2005.

En este 1998, en el que The Cardigans publicaron su Gran Turismo, Diego Ibáñez, el cantante de Carolina Durante tenía solo un año. El eclecticismo musical y temporal del DCODE ha hecho que estos y muchos más hayan coincidido en la gran última fiesta del verano, que nunca defrauda.

Fuente: Los40

Noticias relacionadas